AQUI TE DEJAMOS VER SU PRIMERA ACTUACION,
EL TEMA PARA ESCUCHAR Y VER..."YO SOY AQUEL"
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En 1962, Raphael se alzo con el triunfo en el Festival De Benidorm; pero este galardón lo logro después de su aprendizaje en centros nocturnos, donde adquirió la suficiente experiencia para una carrera que ya llega a mas de cuarenta años.
Según declaraciones del cantante, que nació en Linares, una pequeña ciudad del sur de España el 5 de mayo de 1943, estará en el negocio del canto por mucho tiempo más y muestra de eso es que cuando realiza sus presentaciones en Madrid o en otra ciudad del mundo, el público lo recibe como en sus mejores momentos. Y si como en sus mejore momentos, porque definitivamente ya no es el mismo que una vez vimos cantando “Yo Soy Aquel”. Su experiencia es mucho mayor; pero su voz no es igual y suena a cansada.
La voz de Raphael siempre fue el centro de su personalidad, pues va de tenor a barítono dentro de la canción popular y moderna y fue bien recibido en su país porque en una época que la mayoría de los cantantes eran imitaciones de los ingleses o norteamericanos, el creo un personaje basado en su raíz flamenca y con tonalidades de los cantantes franceses, donde la expresión del cuerpo forma parte de la música. Esa independencia de lo extranjero hizo que fuese respetado desde su primera aparición. Definitivamente Raphael es Raphael y no hay otro igual.
Después del triunfo en el festival, su carrera fue ascendente; pero ha tenido dos etapas, una del 1962 hasta 1966 y la otra de 1966 hasta 1968.
Su primera etapa, donde la unión musical con el compositor Manuel Alejandro, le dio ventas increíbles con temas que lo fueron consagrando con esas letras amorosas de sus inicios. Entonces aparece “El Tamborilero”, un tema grabado en época de navidad, lo que definitivamente le da un giro de 180 grados a su carrera y su aparición en el Festival De Eurovisión en 1966 con “Yo Soy Aquel” y al siguiente año con “Digan Lo Que Digan”, que comienza su carrera totalmente ascendente e imparable y pasa definitivamente a ser conocido en el resto de los países.
Después de tocar el cielo tantas veces, en 1969, comienza la comercialización de su trayectoria y aquí aparecen discos con canciones del acervo latinoamericano, tal vez tratando de extender su fama por ese continente, cosa que no necesitaba, pues esto ya lo había logrado con temas espectaculares. De aquí en adelante el intérprete pierde su genio, su figura y su estrella da paso a que muchos cantantes se le acerquen competitivamente; pero hay que reconocer que con el paso del tiempo no solo él ha perdido calidad. Definitivamente los ochenta no son los sesenta.
Miguel Rafael Martos Sánchez, ese hombre que conocemos como Raphael, logro realizar una carrera que incluye el cine nos ha dejado muestras de calidad vocal pocas veces escuchadas y su presencia en el escenario es indiscutiblemente mucho mas que excelente
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